En dos bolsas grandes, Christian Damián Irrazabal (36) cargó 7 cruces de madera, 10 de metal con sus respectivos paños, 4 paquetes de hule con tierra de cementerio, 2 portarretratos con fotos de difuntos, 6 accesorios de metal de los panteones, 1 palita de jardinería y 1 cuchillo de mesa.
El hombre fue pillado in fraganti en el cementerio municipal de Luque, cuando intentaba llevarle las pertenencias de los difuntos en compañía de dos mujeres, una de ellas, según relató a la policía, sería su pareja.
El procedimiento se realizó en la madrugada de ayer, domingo, en el campo santo del barrio Bella Vista de Luque, situado sobre las calles Coronel Bogado casi Segunda Capital, donde el hoy detenido, al ver la patrullera intentó correr hasta el coche donde le esperaba su novia, pero la mujer apresuró su raje y lo dejó allí abandonado.
Christian Damián fue trasladado hasta el calabozo de la comisaría tercera, donde indicó a los uniformados que fue contratado por una persona para llevarle los objetos de los sepulcros, pero que no sabía supuestamente para qué iban a ser utilizados.
El oficial Gustavo López, ayudante de la citada dependencia, mencionó a EXTRA que no se descarta que los elementos hubieran sido llevabados para la práctica de algún ritual satánico o payé.
