HALLARON LOS HUESOS DEL FINADO EN UN YUYAL DE J. AUGUSTO SALDÍVAR
Macabro: enterró a su marido en el patio de su casa.
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LO MATÓ SIN QUERER
Según las versiones de María Amarilla, el hombre se golpeó por una piedra, luego de que ella le agarre de las piernas.
El secreto mejor guardado estaba a punto de ser revelado. Por ello, María Gloria Amarilla (57) fue hasta el patio trasero de su casa y, con ayuda de una pala, desenterró aquel mal recuerdo.
La policía ya la había visitado dos veces esta semana. Hasta aquel momento, los agentes no se habían dado cuenta de las pequeñas gotas de sangre que, a pesar de transcurrir dos años, nunca desaparecieron del todo.
La versión de que Ramón Alcaraz viajó a la Argentina y de que perdió contacto con todos convenció a su tres hijos: Enrique, Manuel y Francisco, pero no así a los demás familiares, según declaró la propia doña.
Hace tres meses, los hermanos Alcaraz fueron a la Fiscalía a pedir que se investigue su misteriosa desaparición. Allí constataron que el hombre nunca fue registrado por Migraciones.
Ayer, en el tercer intento de esclarecer el hecho, los investigadores volvieron al domicilio de ña María, en J. Augusto Saldívar. En el fondo del lugar encontraron que la tierra fue removida. Debajo de la cama estaban nada menos que partes de los huesos de don Ramón. Su cráneo fue hallado en una bolsa negra, en medio de un yuyal cercano.
Confesión
“Cuando se murió me asusté y no sabía qué hacer. Pensé en el pozo del basurero y ahí le puse en una bolsa”, confesó por fin la señora, en Investigación de Delitos, luego de ser detenida e imputada por homicidio doloso.
Admitió que aquel 15 de noviembre del 2015 el hombre estaba borracho y la había golpeado mucho. “Yo me resbalé y me sostuve de su pierna, ahí el cayó y golpeó su cabeza por una piedra”, relató la viuda. Agregó que su marido era muy violento. “No es solo a mí que me molestaba, al barrio le molestaba. Hasta robaba”, justificó Amarilla, quien podría pasar en la cárcel 30 años, según el fiscal Nicasio Galeano.