La compatriota Ada Benítez Colmán (34) dejó huérfanos a dos hijos menores de edad. La víctima fue apuñalada por su expareja. Era temprano cuando la cuñada de la paraguaya Ada Graciela Benítez Colmán (34), quien residía desde hace más de 10 años en Ibiza, España, bajó del edificio en el que vivían para dirigirse a su trabajo. Aunque parecía ser un sábado tranquilo, se pegó un gran susto cuando vio el cuerpo sin vida de Ada, que yacía en el suelo. La compatriota vivía en el departamento con sus dos hijos, su hermano y su cuñada.
La Policía española manifestó que Ada fue apuñalada hasta morir. El hecho habría sucedido en la madrugada de ayer. Horas más tarde, encontraron muerto a su exnovio, Julio Ernesto Martínez (26), de nacionalidad paraguaya, en el mirador de Es Vedrá. Los investigadores sostienen que aparentemente el joven cometió el crimen y luego se lanzó al vacío.
Años de trabajo
La familia de la víctima, oriunda de Presidente Franco, se encuentra destrozada ante la pérdida. José Dávalos, primo de la fallecida, recordó a Ada como una mujer fuerte y luchadora. La compatriota trabajaba en un comedor ubicado frente a su residencia. “Su cuerpo está en la morgue. No sabemos cuándo llegará porque hay trámites muy largos. También tenemos que pagar mucha plata”, dijo Dávalos.
La comunidad paraguaya en España prepara actividades solidarias a fin de juntar dinero para pagar el traslado de los restos de la víctima.