“Una luz en el fondo de la oscuridad” es como describieron esta nueva etapa de sus vidas las mujeres que ayer, por fin, volvieron a la libertad.
Luego de varios años de encierro, los portones del Centro Penitenciario Buen Pastor se abrieron y por ellos salían las beneficiadas con una alegría que no podían contener.
Como cada año, el presidente Horacio Cartes concedió el indulto a las reclusas, no sin antes haberse realizado un minucioso estudio a todas. Esta vez, 11 mujeres privadas de libertad recibieron la indulgencia.
Diez de ellas guardaban reclusión en la mencionada peninteciaría, mientras que una estaba presa en Juana María de Lara, de Ciudad del Este. Todas estaban condenadas por microtráfico de drogas.
Se portaron bien
La viceministra de Política Criminal, Cecilia Pérez, explicó que en principio 63 nombres conformaban la lista, sin embargo solo 11 internas cumplieron con el proceso para recibir el beneficio.
La buena conducta y el estudio psicológico influyeron a la hora de decidir, además de otros factores. La funcionaria aseguró que se realizará el seguimiento y apoyo de las mujeres con el fin de reinsertarl
as a la sociedad.
Las beneficiarias, a estas horas, ya están con sus familias disfrutando de esta nueva oportunidad que les dio la vida.
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