Un niño de 12 años, que vive cerca del vertedero municipal de Pedro Juan Caballero, donde encontró unas esposas, de esas que usan los policías, y en su inocencia se las colocó en las muñecas.
Minutos después intentó sacarlas, pero no pudo, por lo que pidió socorro a su papá, quien intentó ayudarle, pero tampoco lo logró. La familia llamó a un voluntario que vive en la zona y este le mandó al cuartel de los Bomberos Azules de Pedro Juan Caballero.
“La esposa ya le estaba causando daño al nene, pues le atajaba la circulación, por lo que tuvimos que cortarle”, dijo el voluntario Domingo Podesta.
El mismo indicó que el niño estaba tranquilo mientras ellos trabajaban y en menos de 10 minutos pudieron liberar al niño y regresó nuevamente a su casa.
Podesta contó que es la primera vez que intervienen un caso así, que involucra esposas, pero normalmente liberan los dedos de los anillos que quedan atorados.