Las mascotas de Patricia Rojas son “John” y “Thor”. Ambos cuidan la casa contra los ladrones, argumentó la propietaria. “Yo me iba a la despensa nomás, todavía ni pasaba frente a la casa de esos perros, cuando he visto que los dos venían corriendo hacia mí. No me dio tiempo de hacer nada, uno me saltó por el brazo y el otro me agarró de la pierna. Me echaron al piso, y desastre me hicieron, yo me cubría la cara y me mordieron entre el cuello y la cabeza”, cuenta Óscar López, un reciclador del barrio Tacumbú de Asunción.
El hombre está en cama, con las heridas todavía frescas. Sus piernas y brazos quedaron hinchados luego del ataque que sufrió en la noche del martes. No es la primera vez que es víctima de los dos perros de raza boxer que pertenecen a una vecina. Un mes atrás ya había sido mordido por los canes.
“Aquella vez no les denuncié porque no quería armar problema entre vecinos, pero esta vez no tuve de otra. Y ellos si que son los que se enojan, hasta ahora no vinieron a hablar conmigo”, ventiló López.
El ataque de las mascotas dividió a los pobladores del vecindario. Algunos manifestaron que los animales son un peligro constante y pidieron que sean sacados del vecindario. Otros señalaron que los perrunos solo reaccionan contra aquellos que suelen molestarlos. Patricia Rojas es la propietaria de John y Thor, los perros de la discordia.
Inofensivos
“Mis mascotas no son malas, hace años las tenemos en casa y no están atadas porque nunca le hicieron nada a nadie, solamente a ese señor (López). Una vez le cortó la punta de la cola a John y desde esa vez no le puede ver”, aseguró la lugareña.