Para Raquel Méndez es un problemón tener que pasar todos los días por el molinete del colectivo cuando va al trabajo, ya que su físico no le ayuda. “Yo soy un poco gordita y me tranco, porque la entrada en donde está el molinete es muy pequeña”, se quejó la usuaria.
El inconveniente también afecta a embarazadas, adultos mayores, los que viajan con criaturas o cargas pesadas, pues deben hacer el doble de esfuerzo para cruzar el hierro giratorio, según reclamos que acercaron algunos pasajeros a EXTRA.
“Para mí que tienen que sacar los molinetes, porque cuando te subís con criaturas es muy difícil pasar. Golpea todo a los niños. Ellos tienen cámara en el colectivo y también hay inspectores para controlar las boletas”, opinó Lorena Turo. Estas reacciones se dan luego de que la Sala Constitucional de la Corte rechazara el pedido de tres empresas de transporte para utilizar molinetes en sus colectivos.
La solicitud fue presentada por las firmas Lince Empresa de Transporte de Pasajeros (18 y 26), Empresa de Transporte 1ro. de Diciembre (Línea 41) y Empresa de Transporte Guaraní (Líneas 2 y 7).
César Ruiz Díaz, titular de Cetrapam, contó que hace años salió la Ordenanza Municipal, en Asunción, que prohíbe el uso del molinete, pero empresas asociadas al gremio iniciaron una acción de inconstitucionalidad, la Corte dictó de forma favorable y por eso sus unidades pueden usar el molinete.