Había esperanzas de encontrarlo con vida.
Don Mario Ovelar (59) estaba muy enfermo, apenas podía caminar a raíz de los golpes que supuestamente le dio su ex, según cuentan sus allegados.
El día de su desaparición, el viernes 6 de octubre, salió de su lugar de trabajo para dirigirse a casa, pero nunca llegó.
Ayer, cerca de las 8:00, su cuerpo fue localizado en una zanja, en la compañía Ykua Kau, a 4 kilómetros de su casa.
Se cree que murió hace varios días, debido al avanzado estado de descomposición de cuerpo, según las declaraciones del oficial Librado Ávila, de la comisaría 9.ª, de la zona.
Mochila fue clave
Alrededor de las 20:00 del jueves último, un vecino se contactó con las autoridades para avisar que el 8 de octubre encontró un kepis y una mochila que contenía un candado y una petaca de caña, pero la guardó.
Al ver las noticias supo que se trataba de las pertenencias de don Mario y las devolvió.
Gracias a esa pista se pudo llegar hasta donde estaba el cuerpo, a unos 3 kilómetros.
Oscar Ovelar (34) hijo de Mario, pudo reconocer a su padre, pero no cree que él solo haya llegado hasta ese lugar. Una zona boscosa y muy fea de transitar, según dijo.
“Es todo muy raro, porque se encontró la mochila en un lugar, la gorra en otro lugar. No tenía la misma ropa. Cuando salió de la casa de su patrón tenía un pantalón y una remera roja manga larga, pero se lo encontró con un short y una remera azul”, apuntó.
Entre unas ramas se encontró el pantalón, pero también se presume que se cambió.
“Mi papá no pudo haber tomado ese camino solo, hay muchas sospechas, esto va a seguir”, dijo. El celular y la billetera de don Mario no se encontraron, por lo tanto su hijo pide que se siga investigando. El cuerpo fue llevado a la morgue de Asunción, para una autopsia.
Tenía una hemorragia interna
Tanto la ex de Mario como él se denunciaron mutuamente por violencia familiar. Los vecinos dicen que el fallecido tomaba mucho, pero la doña supuestamente le molía a golpes. En una de esas peleas, ella según las versiones le reventó con una silla y desde esa vez comenzó a perder sangre en sus partes íntimas.
“Varias veces se vio cuando la señora le maltrataba, insultaba y pegaba”, manifestó un poblador.
Aparentemente se desorientó, según fiscal
El fiscal Eladio Cohene mencionó que aparentemente el cuerpo no tenía señales de violencia.
“Por los indicios podríamos presumir que se habría desorientado y habría terminado por esa zona boscosa”, dijo.