Daniel Añazco Cardozo fue aprehendido el pasado 15 de junio, luego de una persecución de unos 20 kilómetros entre Liberación y General Resquín, en el departamento de San Pedro.
El joven habría hecho Willy y otras maniobras peligrosas sobre la Ruta 8, poniendo en riesgo a automovilistas y peatones.
Los policías lograron detenerlo dentro de una estación de servicios donde intentó refugiarse, pero grande fue su sorpresa cuando el dueño del servicentro los denunció por supuesto “atropello de domicilio”.
El motoca fue imputado por exposición al peligro en el tránsito, pero los tres agentes intervinientes ahora enfrentan una querella, y el denunciante exige G. 100 millones a cada uno como resarcimiento.
A full los controles
Por casos como este, la Policía de Alto Paraná está reforzando los controles a full. Este fin de semana realizaron operativos de prevención e incautaron unas 50 motos, especialmente en Ciudad del Este y Juan León Mallorquín.
Según informó a EXTRA el comisario Jorge Cardozo, del Departamento de Seguridad de Tránsito, la mayoría de los involucrados tenía entre 14 y 17 años.
“Ninguno contaba con licencia ni usaba casco de protección, lo que agrava aún más la situación”, expresó.
En Minga Guazú también se hicieron controles, y la fiscal Carolina Gadea confirmó que ya está preparando las imputaciones tanto para los adolescentes como para sus padres.
“Aquellos sin licencia serán imputados por exposición al peligro en el tránsito terrestre, y los padres por falta al deber del cuidado”, informó.
Les pillan por redes
Además, resaltó que muchos de los adolescentes graban sus maniobras y las suben a redes sociales, lo que facilita ubicar los puntos donde se reúnen.
“Queremos instar a los padres a que controlen más a sus hijos”, pidió Cardozo.
Por su parte, el director de Policía de Alto Paraná, comisario general inspector Feliciano Martínez, anunció que los operativos seguirán.
“La preocupación no es solo nuestra, sino de toda la ciudadanía. Queremos evitar tragedias que lamentar”, afirmó.