Como soldaditos, dos linces hicieron trotar por varias cuadras, esposados y en medio de la calle, a dos jovencitos, tras ser acusados de robar G. 100.000 a su vecino. Ocurrió en el asentamiento Nueva Esperanza II, del barrio Huguito de Limpio.
Doña María Cristina Larramendi, una de las vecinas, contó a EXTRA que estos dos jóvenes son mellizos y que no hay foco, plantera, brasero ni frutas que no roben. “Nos tienen en zozobra. En esta última ocasión le robaron la plata al vecino, luego de que le vendieran por G. 20.000 el brasero robado de otro vecino. El señor les pasó su G. 100.000 y ellos escaparon sin darle su vuelto”, contó la doña.
Tras el pedido de ayuda de la víctima, llamaron al 911 y en minutos se acercaron al lugar los linces, quienes esposaron a los ladrones y les obligaron a meterle el trote en la calle, mientras eran abucheados por sus vecinos.
“Hay muchos chespiritos (adictos a las drogas) por acá, a nosotros nos robaron hasta el foco. La señora Graciela Recalde, que es la presidenta del asentamiento, no anda. Ni alumbrado público tenemos y vivimos en total inseguridad”, lamentó la mujer.
Contó que, tras el hecho, Ariel y Abel, los mellis, fueron liberados nuevamente por los uniformados. “Ese es el problema acá, les atrapan y luego les sueltan de nuevo, sus familiares no permiten que les lleven a la cárcel, en vez de que se vayan y se rehabiliten ahí mba’e”, dijo María.