Don Gabino Martínez confió en su sobrino Richard Alfonso Díaz, de 25 años, y el lunes, le entregó la suma de 14.350.000 para que fuera a pagar una deuda que tenía por unas bananas, en Caaguazú, pero al llegar al lugar, supuestamente el joven fue interceptado por delincuentes.
Según el relato de Richard, al intentar cruzar la ruta, una camioneta furgón se quedó a su costado. Uno de los ocupantes abrió la puerta lateral y con arma de fuego le alzó en el interior, en donde había tres hombres, donde le vendaron los ojos y le sacaron el dinero que tenía en su poder.
Posteriormente, lo llevaron a un lugar distante a 15 o 20 minutos aproximadamente, según relató, lo bajaron en una casa y le dejaron ahí sin darle de tomar agua, ni de comer, luego el día de ayer, miércoles, a las 08:30 le trasladaron nuevamente en la camioneta furgón hasta la calle vecinal Paraje, del barrio Toro Blanco de Caaguazú, dejándole libre.
De ese lugar, supuestamente fue auxiliado por un transeúnte en una moto que le acercó hasta la terminal de ómnibus. De ahí fue hasta la casa de un amigo, ubicada frente de la parroquia San Francisco, después se fue hasta la comisaría segunda para realizar su denuncia correspondiente.
Todo marchaba bien, hasta que comenzó a sentirse nervioso y al ser nuevamente consultado sobre los hechos, comenzó a dudar y caer en contradicciones.
Primero manifestó que los delincuentes le sacaron el celular, pero al momento de liberarlo le entregaron nuevamente, ante esto, los uniformados le solicitaron el teléfono, donde se encontró que él joven estaba usando (mensajeando) los días que supuestamente estuvo secuestrado y sin celular, por lo que quedó detenido por simulación de hecho punible sobre robo agravado y secuestro.