La muerte de Romina Ayelén Peralta Rodríguez consternó a todo el país. La chica de 16 falleció a consecuencia de la explosión de un vapeador, que según los últimos datos estaba enchufado, lo que habría ocasionado el estallido del aparato, informó la fiscala Gladys González.
“Evidentemente lo utilizó de esa forma”, indicó González, aclarando que se descartó, sin embargo, que haya sufrido una descarga eléctrica la muchacha.
De acuerdo con los datos, esto le ocasionó una grave hemorragia. La víctima llegó alrededor de las 21:00 horas del lunes al área de Urgencias del Hospital General de Lambaré (Central), donde poco después se confirmó su deceso.
Su padre, Roberto Peralta, aseguró que Romina no utilizaba ese tipo de aparatos, por lo que pidió que se investigue quién le dio. “Ahora vamos a investigar lo que pasó, quién le dio (el vape), porque ella no fumaba”, expresó el papá de la nena. El hombre dijo que su hija estaba con su hermano menor en la pieza, cuando se escuchó una explosión, el niño pidió auxilio y él vio a su hija sangrando y llorando.
“Por la boca tenía una hemorragia bien activa; entonces, los médicos y el personal sanitario estuvieron más de dos horas encima de la paciente, la reanimación, fue más de una hora y media, incluso recibió transfusión sanguínea, porque muchísima sangre perdió”, informó la jefa de Urgencias, Dra. Luz Vázquez.
Llegó sin signos vitales, pero se hizo el esfuerzo. Explicó que tuvo un trauma de tórax mixto, que derivó en un shock hipovolémico y esa probablemente fue la causa de muerte. También pudo haber sufrido una reacción alérgica.
Por su parte, la fiscala Gladys González, quien investigará el caso, precisó que cuentan con los vestigios del cigarrillo electrónico que será sometido a peritaje para determinar si contaba o no con alguna falla. Los padres no quisieron que se le realice la autopsia porque ellos vieron lo que pasó.