Una familia realizará un tour por distintos cementerios para visitar a sus parientes que fallecieron por causa de la pandemia.
“Tres tíos perdí por el COVID, hay dos que están en el mismo cementerio pero no en el mismo panteón, por eso es un tour”, señaló Marina L.
El 2 de noviembre será el primer día de Todos los Muertos o Día de las Ánimas con portones abiertos tras la pandemia.
Virginia Sánchez (49), florista del Cementerio del Este, se instalará el domingo en su puesto y atenderá por tres días seguidos.
Estarán con ella sus hijos arreglando las flores y haciendo hamburguesas de cara a esta fecha y la previa, el 1 de noviembre, día de Todos los Santos.
“Queremos recuperar por lo menos un poco nuestra pérdida. No trabajamos mucho tiempo, estaba todo cerrado el cementerio”, mencionó a EXTRA.
Pidió 20 paquetes de crisantemos brasileños, que es lo que más se lleva, 3 por G. 20 mil. También le llegarán 200 claveles ecuatorianos.
“El 2 de noviembre siempre entra más gente. Igual si cae martes. Esperemos que sea así”, resaltó.
Algunos clientes le cuentan que sus parientes murieron por COVID, enfermedad o algún accidente.
En condiciones
Gregorio Valenzuela (40), albañil independiente, pintó un panteón ayer con la ayuda de dos limpiadoras que quitaban la tela de araña con escobas.
“Hay 100% más de interés ahora en todo sentido. Significa más ingresos para trabajadores como nosotros y la municipalidad porque se ponen al día”, dijo.
El Día de los Difuntos con los días de la Madre y del Padre son las fechas que más llenan el cementerio. El Covid mató a más de 16.200 personas en nuestro país.
Otros que se preparan para estas celebraciones son los que elaboran cruces de madera y lápidas de mármol. “La cruz es lo que más piden”, dijo Édgar Acuña.
Horario
El Cementerio del Este abrirá los portones desde las 07:00 hasta las 17:00 los días 1 y 2 de noviembre.
“Va a haber personal en los portones que va a recibir a la gente con alcohol, lavado de manos y se respeta el protocolo”, anunció el administrador Juan Ramírez.
Destacó la limpieza general que realizaron ayer en pasillos y caminos centrales con los personales de la minga municipal.
Los primeros fallecidos por COVID-19 entre marzo y junio del 2020 se sepultaban solamente en el cementerio de la Recoleta, Asunción, sin importar de qué ciudades eran.
“Nos organizamos para una jornada donde habrá mucha gente”, dijo el administrador, Marcelo Enciso.
Estiman que irá gente del interior que tiene a sus parientes enterrados allí en forma obligada. Habilitarán los portones el sábado desde las 06:45 hasta las 18:30.
Canta a los fallecidos
Toribio Mereles (39), de Capiatá, trabaja cantando y rezando por los muertos en distintos cementerios del país.
Comenzó a los 12 años acarreando las coronas hasta que un día una señora no pudo cantar toda una canción y él completó sin ayuda.
“Cuando hay acompañamiento yo me ofrezco y canto a voluntad”, mencionó.
Señaló que el coronavirus hizo que ya no haya velatorios, entonces le citan para encontrarse en cierto portón de algún cementerio para el sepelio.
“Nos estamos preparando. El 1 y 2 ojalá que vengan porque hay muchos que tienen miedo todavía. (Pasó) un año que no vienen a visitarle más a sus muertos porque el portón estaba luego cerrado. Me preparo con los arreglitos”, sostuvo por su parte la florista Gladys Zaracho.