El Juez Humberto Otazú decidió otorgar arresto domiciliario a Óscar González Daher y su hijo Rubén González. Ambos imputados por enriquecimiento ilícito, lavado de dinero y declaración falsa.
“Uno de los últimos elementos probatorios pendientes es una pericia contable, la Fiscalía ya cuenta con toda la documentación”, dijo el magistrado.
Más temprano, la abogada defensora, Cecilia Chávez, sostuvo a radio Monumental 1080 AM que los argumentos del juez, en caso de negación, deben ser legales. Sostuvo que el exsenador y su hijo fueron sometidos a un “proceso irregular” desde el momento de la imputación.
No obstante, Chávez recordó que en setiembre se cumple la pena mínima de un año por el hecho de enriquecimiento ilícito y esto daría paso a que padre e hijo salgan en libertad, pero, desde hoy, el exsenador podrá estar en su casa y desde ahí seguir el proceso.