Manuel Benítez fue sacerdote de la diócesis de Carapeguá durante11 años, pero por motivos personales, abandonó la vida religiosa. Actualmente, prepara su candidatura a intendente de Quiindy por el Partido Colorado y anhela llegar a su meta para servir a su comunidad, aunque ya no como representante de la iglesia.
“Dejé el sacerdocio hace 6 años porque quería conformar una familia y prepararme para otros ámbitos de la vida. Ahora estoy culminando mi carrera de Derecho, tengo una esposa y dos hijos. Ese fue el motivo por el cual me retiré, no hubo ningún conflicto con nadie. Al contrario, estoy muy fuertemente ligado al ámbito eclesial”, explicó.
Benítez se afilió al Partido Colorado en 1990, pero es la primera vez que se candidata a un cargo electivo. Su papá fue quien le motivó a entrar a la política. Optó por el movimiento de “Marito”, “Colorado Añetete” y el 26 de julio se enfrentará en las internas a Alba Acevedo de Bogado, del oficialismo.
Fue funcionario de Yacyretá y profesor de la Universidad Católica de Carapeguá; pero tuvo que renunciar a ambos cargos para dedicarse de lleno a su candidatura.
Desde otro ámbito
Indicó que en la política podrá hacer el mismo trabajo que realizaba como sacerdote, pero desde otro ámbito de la vida social, ya que se siente en deuda con la gente que le dio su apoyo y creyó en él siendo sacerdote.
La disciplina, la palabra empeñada, el hecho de luchar por sus objetivos, ser coherente, puntual y disciplinado son las principales enseñanzas que le dejó el sacerdocio, comentó. Añadió que guarda la esperanza de conseguir la victoria en las urnas; de lo contrario, planea emprender una vida profesional en el ámbito del Derecho o en la docencia.