Todo el Hospital Nacional de Itauguá está resguardado con policías desde que Vilmar “Neneco” Acosta, exintendente de Ypejhú, se encuentra internado por un aneurisma de aorta (dilatación de la arteria principal del cuerpo).
Neneco, condenado a 39 años de prisión por haber ordenado el asesinato del periodista Pablo Medina y su asistente Antonia Almada, en Villa Ygatimi, Canindeyú, en el 2014, se encuentra en terapia intensiva hace cuatro días. El exintendente sufrió una descompensación de su salud en la cárcel de Tacumbú, donde cumple su pena.
“Es un poco incómodo (la presencia de policías) que vigilan a todos, desde familiares de pacientes hasta médicos y enfermeros. No estamos acostumbrados, pero es lo correcto y necesario cuando tenemos este tipo de pacientes”, manifestó el Dr. Miguel Ferreira, director del hospital.
Sobre su salud, el médico señaló que Vilmar tiene una “patología cardiovascular grave” y se encuentra medicado y constantemente monitoreado. Además, los médicos están evaluando la posibilidad de que se le realice una cirugía.
¿Por qué mandó liquidar al periodista?
El periodista regional de ABC Color investigó y publicó en el medio una investigación que sostenía que el entonces intendente manejaba las redes del narcotrático y del sicariato en Curuguaty y todo el departamento de Canindeyú.
A raíz de esto, el 16 de octubre del 2014, en un camino vecinal, sicarios enviados por Neneco asesinaron a tiros al periodista y su asistente.
No fue hasta el 19 de diciembre del 2017 que el exintendente fue condenado a 39 años de prisión por el crimen.
Continúa el asesinato a periodistas
El asesinato de periodistas, especialmente en las fronteras del país, sigue creciendo, especialmente por el avance del narcotráfico.
La Coordinadora de Derechos Humanos del Paraguay (Codehupy) y el Sindicato de Periodistas del Paraguay (SPP) presentaron en el Congreso Nacional el “informe sobre crímenes de silenciamiento contra periodistas en Paraguay de 1989 al 2024”, donde señalan que ya suman 22 víctimas.
Resaltaron que de los 22 casos de periodistas asesinados, solo tres tuvieron una sentencia.