En medio de la torrencial lluvia del sábado, entre las cuatro paredes de la pieza de Graciela Ramírez (35), otra tormenta se avecinaba con la llegada de su pareja a la casa.
La mujer lleva dos años de relación con Francisco Robles Trujillo (60), un español que había puesto sus ojos en alguien 25 años menor.
Pero toda esa diferencia parecía no ser un problema hasta que los celos comenzaron a apoderarse del hombre. “Una vez lo denuncié porque me pegó por la cara, retiré después la denuncia porque él me amenazaba”, relató la mujer.
Las peleas se volvían cada vez más frecuentes hasta que en la noche del sábado, el extranjero, borracho, llegó a la vivienda y exigió a su concubina que saliera de ahí.
“Yo me fui y me refugié en un galpón; mi hija de 17 años se quedó nomás encerrada en su pieza por temor, hasta que después volví y entré junto a ella”, relató. En un ataque de histeria, Robles agredió primero a la hija de su concubina. Graciela se metió y comenzaron los forcejeos.
“Como estaba por golpear a mi hija, me tiré encima y él me empujó. Me caí en medio de la lluvia”, dijo la víctima. Tras la discusión, ambas decidieron huir del lugar.
La otra versión
La mujer radicó la denuncia en la comisaría de Capiibary, San Pedro.
Lo mismo hizo Francisco, quien alegó que el agredido fue él. “Ellas rompieron mi lente, me pegaron y quisieron robarme”, sentenció el supuesto agresor.