El exjugador se salvó de la muerte tras un disparo, en el 2010. Desde su recuperación, inició el proceso de separación con la madre de sus hijos. El exfutbolista Salvador Cabañas acudió a Kuimba’e Aty para solicitar asesoría legal para poder ver a sus dos hijos y compartir más tiempo con ellos como familia y no solo durante “visitas espontáneas”. “Hace dos meses que venimos viendo el caso de Salvador. Si bien él tiene un abogado, se acercó para preguntar qué más puede hacer porque su esposa no le permite ver a sus hijos”, dijo Cristian Paniagua, director de la organización.
El Mariscal había solicitado en el Juzgado de la Niñez, en 2014, una autorización para que su esposa, María Lorgia, le permitiera pasar más tiempo con sus hijos. “Salvador no está incumpliendo con la prestación alimentaria porque su esposa cobra directamente el dinero del alquiler de un condominio. Hay veces que puede visitarlos pero, cuando surgen peleas, ya le niegan el derecho que le corresponde como padre”, señaló Paniagua.
Dionisio Cabañas, papá del Chava, admitió que la familia ve muy poco a las criaturas y que los problemas no cesaron, aunque prefirió no ahondar en detalles. “Muy poco podemos ver a los chicos, a veces nos visitan, pero casi nunca”, dijo el señor.