Los sabrosos rollos de Chorizo Sanjuanino llegarán a los clientes con un sello de calidad. Cuando esto ocurra, solo los chorizos que se hicieron en San Juan Bautista, Misiones, podrán llamarse así.
“Cualquiera puede producir chorizo, (...) pero tiene que ocuparse de llamarle de otra forma”, dijo el titular de la Dirección de Propiedad Intelectual (Dinapi), Joel Talavera.
Afirmó en entrevista a EXTRA que el chorizo sanjuanino ya se ganó una reputación de la que otros no pueden aprovecharse. Dinapi les dio un reconocimiento preliminar de indicación geográfica, para que nadie les piratee el nombre.
“La gastronomía local puede ganar con visitantes del país y el extranjero. Se benefician los restaurantes”, dijo.
Hasta ahora, son cuatro los productos con indicación geográfica. El primero es el ao po’i de Yataity, Guairá; el segundo, es la miel de Arroyos y Esteros; el tercero es la miel natural de humedales de Ñeembucú y el cuarto es el chorizo sanjuanino.
Proceso penal
El que use indebidamente el nombre “Chorizo sanjuanino” se expone a un proceso penal y a que el productor que tenga la autorización solicite que esos productos se retiren del mercado. Y a una multa de hasta G. 264.153.000.
Los sanjuaninos tienen un comité de promoción. Tienen 60 días para constituirse en un comité regulador vía escribanía.
“El que quiera llevar el sello deberá cumplir con requisitos del comité regulador”, explicó la Ing. Nelli Maciel, presi de la comisión de productores. El gremio integran 11 productores.
De la ciudad salen 500 kilos de chorizo por cada productor por semana, es decir 5.500 kilos en total, dijo. El principal destino es Asunción y ciudades vecinas. El producto no tendrá aditivos, preservantes ni resaltador de sabor.
La historia inició hace 70 años
El creador del chorizo sanjuanino tiene nombre y apellido. Se trata de Aníbal Amarilla, quien recibió la ayuda del español radicado Sebastián Sasiain.
“Le dio la idea entre copas y copas y días de pesca”, comentó Guillermo Ríos, productor sanjuanino.
Don Aníbal empezó, llevó al mercado a vender esos productos hace 70 años y poco a poco ganó relevancia. Hasta hoy en día, él y su familia se dedican a la venta.
Ríos aseguró que el chorizo no tendría que subir de precio una vez que tenga la certificación. Actualmente se vende a G. 25.000 y a G. 30.000 por kilo en San Juan. Manifestó que antes se usaba cebolla y jugo de apepú o pomelo, de acuerdo a la estación del año.
“Esperanzados, aunque la verdad falta mucho camino para recibir la certificación. Nuestra comisión está trabajando hace un año y medio, se conformó la Comisión de Productores de Chorizo Sanjuanino para gestionar esto. Es un gran paso pero falta mucho por recorrer”, afirmó.