19 may. 2024

Dirigentes colo’o y negacionistas de la pandemia marcharán contra Mazzoleni y Sequera

Pedirán que renuncien o que los rajen y amenazan “arrastrar” a 30.000 personas de Alto Paraná a la capital.

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Dirigentes esteños acusan al gobierno de sumarse a un plan internacional de generar miedo en la gente.

Twitter: Presidencia

Empresarios y dirigentes colorados de Alto Paraná preparan una movilización, sin fecha todavía, para exigir que rajen el ministro de Salud Julio Mazzoleni y el Director de Vigilancia de la Salud, Guillermo Sequera, porque están hartos de la cuarentena y no creen en la pandemia de nuevo coronavirus.

El anuncio lo hizo ayer a través de los medios José Martínez, dueño de una constructora y dirigente del Movimiento Reconciliación Colorada.

“Mazzoleni y Sequera se tienen que ir sí o sí, tienen que dejar el Ministerio. El Paraguay no puede ser esclavo de empresarios y corporaciones internacionales para venir a esclavizarnos y arruinar nuestras vidas”, dijo a la 1020 AM.

Cuestionó las medidas de restricción social y las clases virtuales: “nos están instalando un modelo de vida para acostumbrarnos y domesticarnos, para convertirnos en un robot”, le bajó.

Esta mañana habló de lo mismo el arquitecto Hugo Vázquez, de la Cámara Paraguaya de la Industria de Construcción de Alto Paraná.

“Nos preocupa el encierro, esta falsa pandemia; esta es una pandemia no médica, es una ingeniería social”, dijo él a radio Ñanduti. El “plan” mundial sería mantener a la población con miedo, pero no especificó con qué fines. Cuestionó la cuarentena diciendo que en Suecia no se aplicó y le fue bien, supuestamente.

Sobre la COVID-19, dijo que es solo una gripe y que la onda es comer frutas y verduras para no enfermarse. “Los hospitales están vacíos y las terapias -es cierto- están llenas, pero de otras patologías”, expresó.

Esta tarde se reúnen los diversos sectores interesados en la destitución de los altos funcionarios de Salud. Martínez, que quiso se intendente de Ciudad del Este el año pasado. dijo que la meta era movilizar 30.000 almas a la capital. “Vamos a arrastrar a gente de Caaguazú, Cordillera y Central y vamos a hacernos sentir como pueblo”, manifestó muy enérgicamente.