Un gran susto se llevó una familia del barrio San Antonio, de Luque, esta madrugada. Cerca de la 01:30, un ruido los despertó: desconocidos ingresaron a la casa e incendiaron el vehículo.
Para ello, rociaron gasoil sobre el rodado. Sin embargo, la rápida acción del propietario, Fausto Cantero, evitó que el fuego consumiera por completo el móvil.
“Dejaron dos termos en casa, que usaron para traer gasolina, se nota que no tienen experiencias porque si usaban nafta iban a incendiar rápidamente el vehículo. No tengo problemas con nadie y no sé quienes fueron”, afirmó Cantero.
Según el hombre, ningún integrante de la familia tiene problemas con nadie, por lo que le extraña que esto haya pasado. Sospecha de adictos de la zona.
En el lugar fueron encontrados, además de los dos termos en el que llevaban el combustible, una peluca.