El homicidio más salvaje en lo que va del año fue cometido ayer en la Colonia Aceite, al costado de la Ruta PY 05, a la altura del Parque Nacional Cerro Corá, departamento del Amambay.
Allí, cerca de las 6 de la mañana, encontraron el cadáver de un hombre a quien le habían cortado las dos manos y se las ataron a las piernas con piolas.
También le cercenaron las orejas al prójimo, que no portaba ningún documento al momento del hallazgo.
Policías locales calculan que la víctima fue torturada en otra parte y después arrojada allí.
Tenía trapo ky’a
Agentes identificaron al hoy finado como Pablo Darío Cantero Portillo (31), oriundo de Paso Horqueta, Concepción, usando el sistema electrónico de huellas AFIS. La pareja del hombre, además, lo reconoció en la morgue del Hospital Regional de Pedro Juan Caballero.
El sujeto, había sido tenía orden de captura por homicidio en zona de Filadelfia, Chaco, según los registros policiales.
Hipótesis
Los investigadores sospechan que, por la forma en que dejaron al hombre, se trata de un claro mensaje de la mafia.
Dicen que le cortaron las manos porque fue “pokovi”, o sea, robó algo de valor a algún “patrón” de frontera.
Que le hayan cortado las orejas también representaría alguna advertencia. Además, los autores querían que el cuerpo sea encontrado rápido, por eso lo dejaron en un lugar visible y donde no sería atacado por animales.
Hace cinco años
Pablo Ramón Cantero se acercó hasta el hospital regional para retirar el cuerpo de su hijo.
Muy triste, contó a periodistas que hace aproximadamente cinco años su hijo fue a trabajar en la zona de Pedro Juan Caballero. Agregó que hacía tiempo no hablaba con él.
El familiar aseguró que tampoco sabía en qué estaba metido su retoño y qué hacía específicamente. Tampoco supo explicar por qué le jugaron de tan mala manera a la víctima.
Acribillado frente a su casa
Sicarios ejecutaron ayer a un hombre a eso de las 11:50 de la mañana.
Se trata de Julio César Cabañas, de 36 años, quien estaba sentado con un amigo frente a su casa en zona de Calle 10, en el distrito de Horqueta, Concepción. Los matones eran cuatro hombres enmascarados que llegaron en un auto Toyota, modelo Allion, color negro, sin chapa.
Dos de ellos bajaron del móvil, uno con una pistola 9 mm y otro con un fusil de grueso calibre. Ambos empezaron a disparar contra Julio César, que murió al recibir varios balazos.
Uno Pedrojuanino
El 30 de julio del año pasado en la “frontera seca”, lado brasileño, fue hallado sin vida Edmundo Alvarenga González (19), quien fue raptado en Pedro Juan Caballero. Al joven le cortaron parte del pecho.
Dos en un tambor
En la Colonia República, de Pedro Juan Caballero, en la mañana del 28 de julio del año pasado, encontraron el cuerpo descuartizado de un joven de 16 años, en un tambor. Los asesinos dejaron una nota que decía “no robarás más”.