
La larga caminata rumbo a la Villa Serrana y las tentaciones expuestas al costado de la vía pública, pueden ser tan deliciosas como nocivas para la salud, asegura el nutricionista Fidel Zenteno. Recomendó a los peregrinos que si van a consumir alimentos de la calle se fijen si está bien envasados o cubiertos y de ser posible, optar por una dieta más liviana como frutas de estación y beber mucha agua durante el trayecto a Caacupé.
Comida chatarra
Por otra parte, el nutricionista Erwin Bogado advirtió que se debe tener mucho cuidado con el consumo de la tradicional chipa acompañada de la butifarra y el asadito.
Señaló que estas comidas pueden ser contraproducente para la salud ya que contienen mucha sal y grasa, y pueden alterar la presión arterial.
Recomienda la buena hidratación durante la caminata evitando las bebidas gaseosas y que contengan alcohol. Dijo que el agua embotellada es la más recomendable para la hidratación. En cuanto al tereré comentó que puede ser engañoso y que en actividades como estas es preferible el vital líquido para no deshidratarse.
Sin intoxicados
El coordinador del operativo de salud de Caacupé, Domingo Pizurno informó que hasta ayer no se registraron casos de intoxicación. No obstante, indicó que es imposible controlar la cantidad de vendedores ambulantes, ya que “aparecen y desaparecen”.
Este año se realizan controles conjuntos en Caacupé.