El cuidador del cementerio Central de Pedro Juan Caballero se llevó un terrible susto cuando llegó a su lugar de trabajo y vio que una tumba había sido profanada.
Julio Cardoso, brasileño de 72 años, falleció el martes en el Hospital de Ponta Pora, a causa de una insuficiencia renal y fue sepultado ayer en horas de la tarde.
Durante la noche, el cuerpo fue sacado del cajón. Le cortaron la cabeza y el brazo derecho, dejando el resto del cuerpo tirado.
En la Jefatura de Amambay informaron que se desconoce si el hombre habría tenido enemigos.