Un tremendo conflicto se está viviendo en el Colegio Nacional Fernando de la Mora, de la ciudad joven y feliz, donde un alumno que se autopercibe como mujer quiso defender su proyecto final con la pollera de vestir.
En la institución educativa hay opiniones divididas. Algunos padres exigen que se respeten las normas y desde el colegio sentaron postura: el alumno no va a exponer hasta que use el uniforme de varón.
Desde la Unión Nacional de Estudiantes del Paraguay (Unepy) sacaron un comunicado dirigido al ministro de Educación, Luis Ramírez, manifestando su preocupación ante lo que consideran una situación de “discriminación de identidad de género en el colegio”.
“Rechazamos cualquier forma de violencia, exclusión o imposición que atente contra la libertad y la dignidad de las y los estudiantes. Todas las personas tenemos derecho a culminar nuestros estudios en un entorno seguro y respetuoso, y a vestirnos con la ropa con la que nos sintamos cómodas y cómodos, ya sea pantalón o jumper, sin ser juzgadas ni sancionadas por ello”, expresaron.
“No me respetan”
El estudiante contó que el conflicto empezó el 6 de octubre: en la presentación del proyecto Ñe’ery se les exigió a ir uniformados, por lo que se presentó con su jumper (pollera). Cuatro minutos después un profesor y un director le llamaron para hablar con los interventores, y le exigieron cambiarse de uniforme.
“Desde el momento en que me dijeron que no importa mi identidad de género, que está por encima las normas, ahí dije que no voy a conseguir nada”, dijo.
Ayer debía presentarse uniformado para la defensa de proyecto final de grado, pero no le dejaron exponer por llevar la pollera.
“No me respetan como persona. Estudié para defender mi proyecto”, expresó.
Su transición empezó hace año, cuando ya hubo problemas con algunos profesores.
“Yo le voy a apoyar hasta donde pueda, espero que se haga justicia porque es una persona que vale mucho, me duele esto que pasó con ella. No le deseo a otro. Yo me siento orgullosa de ser su mamá”, sostuvo la madre.
Rechazan
Un grupo de padres también se presentó ayer en el colegio para apoyar la decisión de la institución educativa.
“El problema es que no se cumplen las normas del colegio. El chico es menor de edad, está inscripto por la madre y ella ha firmado un contrato donde acepta la vestimenta de hombre. Al firmar eso debe acatar”, alegó una mamá.
Explicó que desde el 1° curso de la Educación Media conoce al alumno, que con el correr del tiempo se declaró mujer y le molestaba que le llamaban por su nombre masculino con el que estaba inscripto.
“Fuera de la institución puede hacer lo quiera, por dentro se respetan las normas porque es una comunidad con varios menores”, comentó. “No es discriminación, si está inscripto así. Es un juego para él”, agregó.
Postura de la institución educativa
Lilian Quiñónez, abogada del colegio, explicó que desde el MEC y la institución nadie le prohíbe terminar sus estudios al estudiante, pero que la regla es que en la defensa debe ir con el uniforme masculino. Informó que el proyecto en la parte investigativa tiene aprobado porque lo realizó según las reglas. Esperan lo que resuelva el Juzgado de la Niñez de Luque. La abogada del estudiante, Sonia Rojas, dijo que la directora desconoce al Art. 25 de la Constitución Nacional.