El pequeño cuerpo de Francisca estaba acurrucado dentro de una bolsa polietileno, mientras que su cabeza estaba en una mochila. La niña indígena de 12 años tuvo una muerte violenta, había sufrido antes de su deceso, ya que fue maniatada, con una soga en el cuello y la cabeza, y falleció por asfixia.
Tras más de dos años del terrible hallazgo del cuerpo sin vida de Francisca, se dictó la condena para los autores del hecho. Los agentes fiscales Rosa Noguera y Jorge Romero obtuvieron 25 años de cárcel para Norberto Oscar Solís y 22 años para Lino Amarilla, quienes acabaron con la vida de la pequeña.
La causa fue caratulada como feminicidio, ya que la víctima fue drogada, abusada y luego asesinada. La niña indígena de 12 años, bautizada como Francisca, era originaria de la parcialidad nativa ‘‘Mby’a Guaraní’ de Curuguaty, había llegado a Asunción, tras quedar huérfana de madre y sobrevivía en las inmediaciones de la Terminal de Ómnibus de Asunción.
Los antecedentes del caso indican que ella fue hallada sin vida el 24 de febrero del 2020, en un patio baldío, en las inmediaciones de la terminal de Ómnibus. El cuerpo estaba en avanzado estado de descomposición y tenía rastros de haber sufrido una muerte violenta.
