Desde el inicio de la pandemia fue difícil, sobre todo en los barrios más vulnerables. En Asunción, con el pasar de los meses se logró una articulación que unió a varios barrios.
Con el objetivo de amparar o brindar al menos una comida al día a los trabajadores de bañado Sur, bañado Norte, Tacumbú y otros barrios que quedaron sin recursos, surgieron las ollas populares.
La desesperación de las familias que dependían de esas ollas, que en ocasiones quedaron vacías ante la falta de respuesta del gobierno, hasta que la lucha incluso tuvo una ley para solventarlas.
En el bañado Sur siguen alimentando a 600 familias que aún no pueden solventar su alimentación por la crisis económica. Pero el sueño se hizo aún más grande entre las líderes que buscan lograr una entrada de platita asegurada a través de una panadería comunitaria.
Las mujeres decidieron aprender panadería y confitería durante estos meses como símbolo de superación colectiva.
En estos días ya entregaron más de 100 unidades de pan dulces y esperan tener todavía más pedidos.
Los interesados pueden comunicarse al número (0983) 987 670.
Cierre de actividades
En la Olla Popular Solidaria de Caacupemí se vino realizando un “espacio educativo” para los chicos durante todo el año, allí hacían sus tareas y manualidades, mientras sus familias trabajan en la elaboración de la comida o en otras actividades. Mañana miércoles realizarán un cierre simbólico de este espacio con la exposición de trabajitos hechos por ellos mismos.
