Hoy se reúne la Cámara de Diputados para analizar el juicio político contra Arnaldo Giuzzio, ministro del Interior. Tratando de impedir que le rajen y conseguir votos a su favor, Giuzzio se presentó ayer ante la Comisión Permanente del Congreso.
Sacó a la luz documentos contra Horacio Cartes, quien es el que impulsa desde la oposición para que le quiten del cargo, según el secretario de Estado.
Habló del tráfico de cigarrillos y ligó a Cartes con Roque Fabiano Silveira, quien fue condenado por los Estados Unidos.
“Él es su socio. Aparece en la operación ‘Patrão’ con Horacio Cartes como jefe de la operación criminal, Roque Fabiano Silveira y Darío Messer”, afirmó.
Giuzzio añadió que no tiene ningún problema en salir del cargo pero que esa “no va a ser la solución”.
“Le pedí ayer al presidente que saque a los cartistas del gobierno. El gran mérito de este señor (Cartes) es el de extorsionar al presidente Mario Abdo”, dijo.
El homicidio de la influencer Vita Aranda en San Ber y la ola de sicariatos fueron los detonantes para que pidan el cambio de Giuzzio en el Ministerio del Interior.
Por el momento, al que rajó Marito es al Comandante de la Policía Nacional. Asumió el Comisario Gilberto Fleitas en vez de Luis Arias.
Están en mira de rapáis
“En la bolsa de valores, los miembros son Eduardo César Campos Marín, él estaba en el Banco Amambay (hoy Basa del Grupo Cartes)”, afirmó Giuzzio.
Recordó que él fue el que le entregó dólares a Darío Messer para protegerle, según la investigación brasileña. “Una bolsa de delincuentes lo que son estos”, remarcó el aún ministro.
Ligado a los narcos de México
Ante la Comisión Permanente, Giuzzio dijo que el cargamento de cigarrillos de contrabando recorre Europa, Asia, Brasil y retorna a Paraguay. Habló de supuestos nexos hasta con los narcos de México.
“La fábrica que es Tabesa del 2013 al 2018 declaró como venta local 1 billón de dólares y como exportación 43 millones de dólares”, remarcó.
Se preguntó quiénes son los que fuman tanto en el país. Equivalen a 10.000 cajetillas al día en Paraguay.
“¿Ustedes piensan que en México, una organización que se dedica al tráfico de cigarrillos va a ingresar sin el permiso de los narcos? Nunca”, apuntó.