Unos siete agentes de la Policía Nacional quienes realizaban un control preventivo casi fueron arrollados por una conductora en el barrio Pablo Rojas de Ciudad del Este, Departamento de . La misma fue identificada como Laura Antonia Armoa Paredes, de 24 años, quien no contaba con los documentos del vehículo.
Tras una persecución que duró unos minutos, lograron detener a la joven sobre la avenida San Blas, pero nuevamente fue liberada por orden del fiscal Osvaldo Zaracho quien a su vez pidió que el vehículo sea incautado.
El comisario Humberto Galeano, jefe de la comisaría 4ta. de Pablo Rojas, dijo a EXTRA que la señorita alegó que su intención nunca fue atropellar la barrera y que la razón por la cual pasó de largo fue porque “no vio” a los policías.
“No tenía chapa ni cédula verde, ni documento del vehículo, solo tenía registro de conducir. Tras la persecución, la misma tuvo la intención de chocarles por varias cuadras; cuando le pidieron la documentación correspondiente, la misma se negó rotundamente a exhibir sus documentos”, indicó.
Galeano mencionó que en todo momento la conductora presentó una actitud prepotente y se salvó de que se le practique la prueba de alcotest, por esa razón desconoce si estaba en estado de ebriedad o bajo los efectos de alguna droga, según dijo.