Es una planta más que conocida para las personas amantes de lo verde. La diffembachia está en muchos hogares pero resulta ser que es tóxica, explicó el médico pediatra Robert Núñez.
“Es sumamente tóxica debido a los cristales de oxalato de calcio y el ácido oxálico presentes en su savia”, afirmó.
Sostuvo en un hilo de Twitter que el líquido de la planta causa irritaciones al entrar en contacto con la piel, produciendo en mayor o menor grado dermatitis, ampollas, úlceras, enrojecimiento y picor.
“Por ingestión en niños, produce inflamación del sistema digestivo con vómitos y diarreas. Al ingerir algún trozo de esta planta, la reacción es de inmediata irritación, lo que impide que se siga masticando, impidiendo una intoxicación aún mayor”, expresó.
Por eso pidió pensar dos veces antes de seguir teniendo esta planta al alcance de niños y mascotas. “Una planta no vale un susto y si no quieres deshacerte de ella, usa guantes al manipular sus hojas, cuidando que no queden restos de estas en el suelo. Presta atención a los niños, que no lleven a la boca”, insistió.