A medida que pasaba el tiempo, Laura Amarilla (28) se convencía cada vez más de que la motocicleta que le robaron hace 15 días, en Coronel Oviedo, fue carneada.
Estaba segurísima de que los ladrones vendieron sus partes y que nunca volvería a saber nada de su compañero de viajes.
El viernes último recibió una extraña llamada de un policía de la comisaría Primera, donde hizo la denuncia por hurto.
Estaba ka’úre cuando se la llevó, ndajeko
El oficial le contó que encontraron el biciclo, pero en extrañas circunstancias.
El ladrón se había arrepentido y dejó la moto junto con una esquelita en el estacionamiento del cuartel de la Policía Caminera. En la nota explicó que robó la moto estando borracho (ver foto principal).
Laura es instructora de zumba y contó a EXTRA que hace dos domingos dejó la moto en el estacionamiento de la Terminal de Coronel Oviedo , para poder viajar a Asunción para enseñar, pero al regresar se encontró con la desagradable situación.
“Yo estaba trabajando cuando me llamaron para comentarme que apareció la moto. Fue muy graciosa la forma en que encontraron, porque no dejaron en el lugar de donde llevaron, fue muy raro”, apuntó.
Laura dijo que le sacaron la chapa y forzaron el manubrio de su moto. Sin embargo, ni siquiera llevaron la ropa que dejó guardada en el asiento.
“Es un ladrón muy generoso que me devolvió así mismo mis cosas” (risas), manifestó.
Contó que está muy feliz porque sería hendy para ella comprar otro biciclo. Para movilizarse prestaba la moto de su mamá.
En la zona hay cámaras de circuito cerrado, que podrían delatar al chiwewencha que llevó la moto ajena.
Ndaipóri sin querer
El oficial Carlos Nuñez, subjefe de la comisaría Primera, mencionó a EXTRA que el caso está a cargo del Ministerio Público.
El ladrón no podrá salirse con la suya más allá de que haya devuelto la moto, porque se trata de un hurto, dijo.
“Es raro y real”, dijo jefe de la PMT
La moto estuvo en el lugar durante 6 días.
El jefe de la PMT de Coronel Oviedo, Carlos Torales, contó a EXTRA cómo encontraron la moto que estuvo en el lugar desde hace 6 días. “Es algo raro y real”, dijo.
“No le hicimos caso porque muchos vienen y dejan sus motocicletas acá en frente, se van de viaje y al día siguiente vuelven, agarran su moto y se van”.
“En este caso su estadía ya era por varios días, entonces le dije a los muchachos que la moto estaba ahí hace rato. Nos acercamos y nos percatamos de que había un papelito debajo del asiento. Sacamos y ahí encontramos esa atenta esquela”, he’i.
No es el primer caso
En la zona de la Terminal hubo casos de hurtos de motocicletas, pero solamente Laura tuvo la dicha de recuperar la suya. “Yo soy una mujer multifacética y esa moto es mi herramienta de trabajo, tengo dos niñas, soy madre y padre y sabemos cómo es la vida. Fue una pérdida muy grande para mí. Ahora que recuperé voy a seguir trabajando”, apuntó.