Giovanni Ropond (43), de Asunción, ya no sabía qué hacer para espantar a los mosquitos y “bichitos de luz” que cada noche invaden su casa, pues no puede usar insecticidas porque es alérgico, hasta que una amiga le sugirió adoptar un ¡sapo!
“Ella me dijo que los sapos comen los mosquitos y los bichitos, por lo que pregunté en la página de Facebook ‘Alguien Sabe’ si dónde podía conseguir un sapo, muchos tomaron como broma, otros se enojaron, pero lo cierto es que conseguí y me fui a traer”, dijo emocionado Giovanni.
Una joven de Itá Enramada fue quien le dijo dónde había y sin perder más tiempo fue a traerlo el domingo. El sapo está en un pequeño jardín, donde de día se esconde, pero apenas entra el sol ya sale y comienza a ‘saborear’ los bichos. “Creo que hasta alacrán come, porque había mucho en la casa donde alquilo y ahora casi ya no hay”, mencionó.
Posteriormente, el señor alzó un video mostrando cómo el sapo comía los bichitos “para los que preguntaban para qué quería un sapo, ahí está la respuesta”, escribió.
Quiere otro
Giovanni está pensando en ponerle un nombre, pero no sabe cómo elegir, por lo que se le ocurrió hacer una pequeña encuesta en la página de “Alguien Sabe” y el nombre que tenga más reacciones será el ganador. “La gente va a proponer y el que más me guste voy a elegir. Como premio voy a regalar un peluche de sapo, que voy a ir a entregar con mi mascota”, explicó.
También mencionó que su idea es traer otro sapo para que haga compañía al que ya tiene y así no se sienta tan solito. “Ahora solo mi gata le hace compañía, pero sí o sí voy a traer otro”, aseguró.
Según la perspectiva del señor, los bichitos y mosquitos disminuyeron bastante, aunque uno solo no puede con todo “pero sí se nota la diferencia”, manifestó.
Es bueno tenerlo
El biólogo Freddy Bauer, director de la Dirección de Vida Silvestre del Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible (MADES), dijo a EXTRA que es bueno tener sapos en la casa, pues son controladores naturales de las “plagas”.
“Comen todo tipo de insectos, lo que esté a su alcance, desde mosquitos hasta crías pequeñas de ratones”, dijo
Con respecto a que si es peligroso, mencionó que los sapos son los animales más inofensivos que hay, y sobre la creencia de que su pipí es tóxico, dijo que es mentira, pero las glándulas blancas que suelen aparecer en los poros sí son tóxicos, pues cuando se ven amenazados se defienden con eso. “De todos modos, después de tocar a un sapo deben lavarse las manos y no tocarse los ojos ni la cara”, advirtió.
El mismo indicó que si uno quiere tener como mascota, debe dejarlo libre, en su hábitat. “No hay que tenerlos enjaulados, sino soltarlos en el jardín, que se sientan libres”, aconsejó.