La puerta cerrada con tranca llamó la atención de la dueña de casa. Desde el interior escuchó una extraña queja de su sobrina, y desesperada echó abajo la puerta a golpes.
Al ingresar a su vivienda, en Cordillera, la escena era estremecedora: en su pieza, la niña de 9 años lloraba amargamente. Fue hasta la habitación de su padre y lo encontró arreglándose los pantalones.
Desesperada, llevó a la pequeña hasta la casa de otra tía. Esta mujer, al oír los detalles de lo ocurrido, fue a la Codeni y denunció.
El martes finalmente se dio a conocer la pena y el Ministerio Público consiguió 12 años para el abusador. “Lo llamativo de este juicio fue que la defensa, como método, solicitó un estudio psicológico del acusado y el profesional expuso que 100% tenía personalidad de violador”, apuntó la fiscala Gloria Gamarra.
Lamentó que desde hace tiempo nada saben de la niña, pues lo último que supieron fue que la llevaron a vivir a Caaguazú. “El problema es que según la psicóloga, todo esto podría dejar secuelas negativas en ella, y creemos que no está recibiendo la contención necesaria”, aseveró.
La niña vivía con la tía y el abuelo debido a que su madre trabajaba en Argentina.
La fiscala comentó además que la particularidad del citado caso, fue que el Tribunal estaba compuesto en su totalidad por mujeres, por lo que la condena fue alta.
Otro caso
En otro caso, llevado a juicio la semana pasada con otro Tribunal, se le impuso 6 años de cárcel a otro acusado, quien abusó sexualmente de su hijastra.
Habrá registro de abusadores
La Cámara de Diputados sancionó ayer el proyecto de ley mediante el cual se da vía libre a elaborar un registro nacional y banco genético de todos los agresores sexuales de niños y adolescentes. Pasó al Ejecutivo para su promulgación.