Cinco disparos seguidos paralizaron el corazón de doña María Josefina Fernández, quien minutos atrás vio a su hijo “pahague” partir hacia el lugar de donde provenía el aterrador sonido. A partir de allí no encontró tranquilidad.
Miguel Ángel Mendoza Fernández (17) se aventuró el viernes en una zona boscosa en compañía de su amigo J.P. (13). Ambos buscaban miel de abeja. Cuando vieron un suculento panal en la estancia Moquito, de la Colonia Ko’erory, del distrito de Itakyry, Alto Paraná, no dudaron en intentar quitarlo.
Los jóvenes, con sus hachas, derribaron él árbol y se disponían a recolectar la miel. En ese momento llegó sigilosamente el peón Fausto Martínez Cardozo, quien desenfundó su arma y les disparó sin mediar palabra.
Miguel, que estaba descansando en un tronco, recibió cinco impactos de bala por la espalda, a la altura del pecho y el cuello, sin siquiera ver el rostro de su verdugo, mientras el adolescente de 13 años emprendió una rápida huida para salvarse.
J. corrió a dar aviso a los familiares, quienes luego encontraron al chico sin signos de vida. La denuncia fue radicada en la Subcomisaría 48 de la Colonia Nueva Conquista, del mismo distrito, por Daniel Pérez Fernández, uno de los hermanos de la fatal víctima.
“Le disparó a traición, ni siquiera le dio tiempo para hablar”, lamentó Daniel, quien contó que el ahora fallecido era el menor de 9 hermanos y el mimado de la casa. “Era el único que seguía viviendo con mi mamá, estamos destrozados”, dijo.
Pidieron permiso
Según el relato del menor en el informe policial, Miguel Ángel pidió permiso a Federico Brítez, personal de la empresa de seguridad Los Leones, quien permitió que ambos ingresen a la propiedad. Por su parte, Filomena de Chávez, portavoz de la mencionada firma, negó que el guardia sea de esa compañía de vigilantes. El suboficial Isabelino Cantero explicó que se encuentran tras las pistas del autor y que esperan que pronto puedan encontrarlo.
Al cierre de esta edición, los hermanos regresaban de depositar en el cementerio de Itakyry, el cuerpo sin vida de Angelito, mientras sus padres lloraban su triste partida desde una cama de hospital.