Escenas de dolor se vivieron en la Plaza de la República ante el ataque sin precedentes reivindicado por el Estado Islámico. Según los expertos, el ataque perfectamente coordinado y sincronizado revela una “nueva etapa” de la organización. El primer ministro, Manuel Valls, negó la existencia de fallas en los servicios de inteligencia y anunció que entre las medidas previstas por Francia en respuesta a los atentados figuran “aniquilar a los enemigos de la República”, “expulsar a todos esos imanes radicalizados” y “quitar la nacionalidad a aquellos que pisotean lo que constituye el alma francesa”.
“Francia está “en guerra” y atacará al “enemigo” Estado Islámico “para destruirlo”, en Francia, en Europa, en Siria y en Irak, dijo Valls a la TV francesa. Detenidos Los organismos de seguridad identificaron a uno de los atacantes del Bataclan: se trata de un francés de unos 30 años de edad y que ya estaba fichado por los servicios de inteligencia; su nombre no se divulgó. En el mismo lugar, los investigadores hallaron un pasaporte sirio cerca del cuerpo despedazado de uno de los autores.
En tanto, el padre y el hermano de uno de los kamikazes fueron detenidos. En Bruselas, se produjeron varios arrestos, en relación al auto Polo gris alquilado en Bélgica y hallado delante del Bataclan. Siete de los atacantes murieron al activar sus cinturones con explosivos, luego de disparar sin contemplación contra transeúntes o personas al azar.
Según testigos del Bataclán, los atacantes evocaron la situación en Siria e Irak en sus diálogos con los rehenes y usaron fusiles de guerra Kalashnikov. en el líbano, 43 muertos Un día antes, una doble explosión sacudía los suburbios de Beirut, capital del Líbano, provocando al menos 43 muertos y 200 heridos, según fuentes de la Cruz Roja libanesa. El ataque también fue reivindicado por el EI.
