El jefe de la Cámara de Diputados de Brasil y archirrival de la presidenta Dilma Rousseff aceptó este miércoles un pedido de juicio político contra la mandataria por adulteración de las cuentas públicas, un proceso que podría poner fin a su mandato. “Es autorizar la apertura, no dar un juicio de mérito; será la comisión especial que podrá acoger o rechazar” el pedido de impeachment, dijo el presidente de la Cámara baja, Eduardo Cunha.
Varios pasos
- La decisión de este poderoso legislador evangélico, investigado por corrupción en el marco del megafraude a Petrobras debe ser analizada por una comisión de diputados, cuya conclusión será votada por el plenario de la Cámara.
- Si la conclusión de la comisión obtiene 342 aprobaciones del total de 513 diputados, la decisión pasará al Senado.
- El plenario del Senado la juzgará y en caso de que dos tercios de la cámara alta (54 de 81) levanten su mano afirmativamente Rousseff perderá su mandato y será sustituida por su vicepresidente, Michel Temer (PMDB, centro), hasta las próximas elecciones presidenciales del 2018.