Cristina Scuccia, la monja, de 26 años, de la orden de las Ursulinas de la Sagrada Familia, contó que su vida no ha cambiado después de haber ganado en octubre el concurso televisivo suscitando revuelo mundial.
Más de 70 millones de personas vieron en un sólo día su interpretación de “No one” de Alicia Keys a través de You Tube.
La monja cantante preparó para el lanzamiento de su primer disco una original versión de “Like a virgin”, el gran éxito de Madonna en 1984, que transformó en balada romántica.
La religiosa aseguró que el dinero que obtenga del álbum será entregado para obras de beneficencia en Brasil, donde la monja residió, y de Sicilia, su tierra natal.
La religiosa contó que escogió la irreverente canción de la cantante estadounidense, llena de alusiones, porque en realidad la letra habla de la capacidad de amar de las personas, y porque para ella el amor es algo místico.
Como Madonna, la hermana Cristina rodó el video de la canción en Venecia, una estrategia comercial que irrita a algunos sectores católicos.
No se trata de la primera vez que la monja se lanza en operaciones rebeldes, ya que en 2008 había interpretado una comedia musical sobre la fundadora de una orden religiosa en un teatro de su ciudad, Palermo.
Hace dos años decidió trasladarse a vivir en Brasil con niños de la calle y pronunciar sus votos religiosos.