Estoy feliz ahora que ya estoy libre y me puedo ir a casa”, declaró ayer muy emocionada Perla Alegre al salir de la Comisaría de Mujeres, donde pasó una larga noche. La bailarina erótica se había entregado a la Justicia luego de que dictaran una orden de captura en su contra. Ella fue imputada por pornografía infantil y exhibicionismo tras protagonizar un osado baile sin ropa, supuestamente, frente a menores de edad en un balneario de la ciudad de Itá.
La rubia reveló que su experiencia en la comisaría no fue tan mala. “Pude descansar, me trataron bien”, dijo la cuerona.
Con respecto al futuro de su trabajo como bailarina erótica no quiso dar mayores declaraciones, alegando que no se puso a analizar nada todavía.
Medidas alternativas
Guillermina Gavilán, abogada de la procesada, explicó que su cliente fue liberada y que le impusieron medidas alternativas, que se extenderán hasta que la investigación acabe. No podrá salir del país y deberá presentarse mensualmente ante el juzgado.
La profesional del Derecho aseguró que personas malintencionadas intentaron perjudicar a la cuerona. “Demostramos que no fue una fiesta estudiantil y que su contrato no estipulaba una fiesta estudiantil. No existe una denuncia en contra de Perla, la Fiscalía actuó de oficio”, agregó.