Después del relato que hizo Marilina de cómo cuando vino a Asunción se bañaba en agua fría por no saber usar la ducha, decenas de lectores comentaron situaciones parecidas en nuestra fanpage del Facebook. El artículo fue uno de los más compartidos y también polémicos, porque algunos no creían que realmente le pasó eso a la cantante. No es la primera vezque la artista rememora episodios extremos de su niñez.
“Una anécdota con Marilina una vez a las 2 de la mañana después de ver una peli con unos amigos se acercó ella y amablemente me pregunto dónde quedaba la salida del Shopping Villa Morraya a que a esa hora se cierra la entrada principal. Muy linda la nena”, escribió Gabriel Martinez.
Otro de los casos más simpáticos contó Luisa Coronel Arévalos, diciendo que a los 15 le regalaron un cola less pero no sabía como se usa y se puso al revés; es decir, la parte de atrás puso adelante. “Heta asufrí porque soy del campo. Dos años upeicha aipurú hasta que vine a la Argentina y pille como se usa gracias a los maniquíes”, relató.
Por su parte, Griselda Marisa Rojas comentó el caso de una persona que en su valle solo conocía la letrina y cuando vivió en una casa más moderna durante varios años “se subía sobre el inodoro para hacer sus necesidades”.
A su vez, Gloria Isabel Insfrán Medina contó varias costumbres del campo no muy conocidas en la ciudad, pero que no son cosas tristes. “La mayoría de la gente del campo nos bañamos en palangana, yo hasta el Colegio hasta que mis padres pudieron hacerse de agua potable y una ducha”, escribió.
A su turno, Dora Ruiz dijo que la anécdota de Marilina no se podía considerar triste. Contó que cuando su jefe le mandó al BNF no sabía dónde quedaba el banco. “Le pregunté a un taxista la dirección y me dice: ‘señorita, usted está recostada por la puerta del banco, llegaste muy temprano el banco se abre a las 9 y eran las 7 recién’ Y no me siento triste por eso”.
Carmen Alderete contó, por su lado, el caso de una nena que había venido de Caaguazú pero que no conocía el papel higiénico. “Con el tiempo se fue adaptando y aprendiendo a utilizar más cosas. Y hoy día ni pisa todo. Última jejapola”, dijo.
Lari Ibarra no se quedó atrás y reveló: “Yo me puse la primera vez mi modes del revesjajajaj, No sabía; tenía 12 años”.
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