Horas de viaje detrás del volante de su camión, llevaron a Juvencio Manuel Giménez a conocer a una niña de 13 años.
A S. M. C, vagaba por las calles de Santa Rosa del Ycuamandiyú, cuando se cruzó con Juvencio.
Policías locales pactaron la entrega a su padre, R. M., pero este prefirió que el hombre de 28 años se quede con ella.
“Cuando eso era la quinta vez que ella desaparecía de su casa”, comentó a EXTRA Juvencio.
Así fue que la nena acabó viviendo en casa del muchacho en la compañía Ara Pyahu de Capiibary, en San Pedro. Dos años más tarde, junto con su pareja trajo al mundo a un bebito.
Sin embargo, cuando su peque estaba a punto de cumplir un año, la adolescente regresó a las “andanzas” de esconderse por ahí.
Ella desapareció por algunos días, pero finalmente regresó. La vida siguió normal hasta el pasado 23 de julio, cuando una vez más, la chica de tan solo 16 años dejó a su concubino de 31 años.
“El martes se fue a comprar un zapato y yo le pregunté de dónde sacó la plata, y ella me dijo que con lo que le doy no le da para tener sus cosas”, contó Juvencio.
¿Abandono?
Desde entonces, la menor ya no volvió. “La última vez que le vieron se fue a una despensa.
Salió de ahí y ya nada se supo de ella”, comentó el oficial Rubén Quintana, jefe de la subcomisaría local.
El hecho fue comunicado al fiscal de turno Rusbell Benítez, quien comentó a EXTRA que la denuncia hecha por el concubino fue por abandono de hogar, por lo que mucho no pudieron hacer desde la Fiscalía, hasta el momento.
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