Desde hace un año, la vida de Esmeralda Benítez (18) se convirtió en una verdadera pesadilla.
Su vecina, de 17 años, la culpó de tesapo'ê. Como venganza, comenzó a amenazarle de muerte si no se alejaba de su ex, pero la afectada trataba de explicarle que solo se intercambiaron un par de mensajes por wasap, pero los celos de la otra eran enfermizos.
“Yo nunca tuve nada con él, pues mi abuela no quería que yo tuviera novio, solo me escribía y yo le respondía. Pero después, ella pilló que su ex me mandaba mensajes y comenzó a atacarme, como no le hacía caso, amenazó con matarme a mí y a mi familia”, contó a EXTRA la joven.
Esmeralda no quería que su abuela se entere que llegó a chatear con el exnovio de su vecina y lo mantuvo en secreto por un año, de esto se aprovechó la otra.
Pasado unos meses, la menor de 17 años exigió la suma de G. 6.000.000 a Esmeralda, solo así le dejaría en paz. La víctima de la extorsión no tenía esa cantidad, por lo que solo accedió a darle la mitad.
Ahorro
En junio del año pasado, Esmeralda, muerta de miedo tras las constantes amenazas, decidió entregar G. 3.000.000 a su vecina, que era su ahorro para comprarse una moto. Esto hizo que volviera la calma en la vida de la joven, pero no por mucho tiempo.
Las agresiones y amenazas siguieron. “Después de pagarle, yo ya no le vi más a su exnovio, ni le respondía más nada, pero ella seguía celando. Me puse de novia con otro muchacho, pero aún así, no me dejaba en paz”, relató la joven.
Busca pleito
Muy por el contrario, la menor de 17 años comenzó a “hinchar” al novio de Esmeralda. “Yo le reclamé y me dijo que no me va a dejar en paz, que yo no voy a ser feliz con ninguna persona, por suerte mi novio le puso un alto”, siguió contando.
Se le pilló
El pasado 22 de diciembre, una vez más, la “resentida” pidió la otra mitad del acuerdo. Esmeralda, toda desesperada, trató de conseguir los G. 3.000.000, pero solo juntó G. 2.000.000 y se lo dio a finales de diciembre. Pero esta vez, una de sus primas revisó su celular y descubrió todo.
“Ella (su prima) me pilló y le contó a mi abuela, ambas me dijeron que no estaba bien lo que me hacía y me convencieron para denunciar el caso”, manifestó al víctima que pide que se le devuelva su dinero. El suceso ocurrió en el barrio San Miguel de Caaguazú. La familia de la extorsionadora no sabía nada de las andanzas de la menor y pidieron disculpas a Esmeralda, prometiéndole que le devolverán todo, a cambio de que ella retire la denuncia.