12 dic. 2024

Despenseros se candadean y no abren a extraños por miedo

Recurren a las rejas y hasta a perros bravos, otros cierran temprano.

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Lastimosamente, son los trabajadores los que están tras las rejas para evitar ser perjudicados.

El pasatiempo preferido de doña Florentina Aranda (73) siempre fue atender a los clientes en su despensa, en el barrio Republicano de Asunción. Así lo hizo durante casi toda su vida, pero el viernes fue brutalmente atacada por un muchacho que le acuchilló 14 veces.

El chico es José Carlos Brítez, nada menos que su vecino que se había metido en las drogas, según confirmaron los familiares de la abuelita.

Despenseros de todo el país pegaron un grito al cielo al enterarse de aquello y quedaron alarmados al dimensionar el peligro al que están expuestos.

EXTRA habló con algunos de ellos, quienes expresaron su preocupación y contaron las técnicas que usan para cuidarse de los malvivientes.

Doña Beatriz Méndez, quien tiene su local en Fernando de la Mora, dijo que aprendió a estar alerta cuando fue testigo de un violento asalto a sus proveedores.

Desde entonces, ella usa la cortina de metal además de las rejas y evita estar sola.

“Mantengo cerrado y candadeado, los conocidos sí entran, pero a extraños no les hago pasar por nada del mundo”, reveló.

Caja, en el fondo

Ireneo Salinas, dueño del almacén San Cayé, de Villa Elisa, coincidió con el uso de las vallas.

“Puse rejas altas en todo mi patio, y en la despensa ventanilla de hierro, solo abro para pasar los productos, la caja está en el fondo y hago arqueo cada tanto por las dudas”, contó. Pero eso no es todo: tiene dos perros bravos para evitar que entren. “No hay de otra”, dijo.

Los que tienen más ingresos, no solo usan las varillas en sus locales, sino que se ven en la necesidad de pagar un seguro de vigilancia y monitoreo; es el caso de la despensa San Cayetano de Mariano Roque Alonso.

Técnicas antimalevos

  • Usan rejas altas en la casa.
  • Ponen rejas a la puerta y ventanilla del negocio.
  • Cortina de metal, además de las rejas.
  • Colocan cámaras de seguridad dentro del local.
  • Candadean puerta y atienden solo por ventanilla.
  • No colocan productos cerca de la puerta o ventana para evitar que se roben.
  • Cierran temprano y no atienden de madrugada.
  • Cada uno tiene su puesto en la despensa: uno queda en la caja, otro atiende, otro observa, etc.

Abuela que fue apuñalada 14 veces contó todo

Al borde del llanto, Alcides, hijo de doña Florentina Aranda (73), contó a EXTRA que su madre se recupera lentamente de la brutal agresión.

“Ya está más lúcida, habló, pero no mucho, reconoció plenamente al muchacho y lo que más le sorprendió fue que sea un conocido a quien vio crecer todos estos años”, relató.

Lamentó que la doña haya pasado por esto, pero se alegró por su fortaleza. “Es un milagro que esté viva, ella es una persona muy fuerte”, expresó orgulloso.