Antonio Pascottini, apodado “Tortola”, se levanta todos los días con ganas de servir y transmitir buena onda a sus pasajeros. El chofer de micro poco a poco se fue ganando el cariño de la gente, pero el miércoles se llevó todos los aplausos tras ayudar a una embrazada que se sintió mal en el colectivo.
“Yo agradezco muchísimo el gesto que tuvo conmigo, generalmente los choferes son muy hostiles. Prácticamente me desvanecí y él se dio cuenta. Me asusté mucho porque es mi tercer mes de embarazo, estaba lejos de casa y soy primeriza. Luego me sentí cuidada”, contó la pasajera Zuni Martínez.
El trabajador del volante está desde hace 26 años en la empresa de trasporte Automotores de Villa Hayes, Línea 46, y hoy se encuentra de cumpleaños, pero lejos de quedarse a festejar en su casa va a estar conduciendo su colectivo. “Yo siempre considero que los pasajeros son mis patrones, nunca estuve de mal humor”, aseguró el hombre.
Contó que notó que la mujer se sintió mal y que sintió la necesidad de ayudarla. “Se inquietaba, tenía que bajarse al mercado, pero no lo hizo. Yo le di agua, le toqué la mano y estaba fría, ahí me asusté. Estacioné para ir a comprarle coca cola fría, que es recomendable para que se le alce la presión. Luego vino de vuelta conmigo a su casa”, relató el chofer.