Con poco más de un kilo, dos meses antes llegó al mundo el pequeño Christofer Mateo.
El bebito nació a los siete meses de gestación el lunes pasado. Al día siguiente empezaron las complicaciones.
Con el intestino a medio desarrollarse, el pequeño necesitaba con urgencia ser derivado desde el hospital de Hernandarias hasta un centro médico especializado y la odisea de su familia justo ahí, comenzó.
“El paramédico nos dijo que costaría G 500.000, le dije que le iba a dar 300.000 y luego le completaba. Me dijo: ‘por esa plata no me voy’, se rió, agarró su mochila y se fue”, contó Diana G., tía de la criatura.
Ella, refirió que ahí mismo amenazó con llamar a la prensa, y milagrosamente, una licenciada de nombre Francisca Ortíz se ofreció a trasladarlos.
Cerca de las 14:00 horas del martes partieron hacia Asunción. Diana relató que para colmo de males, en el camino hasta explotó una de las ruedas y tuvieron que pedir auxilio a automovilistas que pasaban por el lugar y fue justamente un médico el que les auxilió.
El Dr. Carlos Insaurralde, director del nosocomio contó que el precio varía por cada profesional. “Ese no es un precio estipulado, cada uno pone su precio”, afirmó el médico. Insaurralde lamentó lo sucedido, asegurando que todo esto podía haberse evitado si es que el hospital contaba con rubro para un personal para ese trabajo
Fundaciones ofrecieron una manito
Diana comentó que, estando ya en el hospital de Trinidad, una fundación contactó con ellos para darles una manito con los gastos del bebito. “Hay muchos gastos acá”, afirmó la joven. Para cualquier ayuda, contactar al (0975) 370 745, con Norma, madre del pequeñito.
El bebé debe ser sometido a una intervención quirúrgica. Según su diagnóstico, se encuentra con el intestino elevado y deben corregir eso, porque nació prematuro (a los siete meses).