La presentación paraguaya en Montevideo estuvo a tono con la noche: negra y fría. La Albirroja no mostró indicios de la gran presencia que tuvo la semana pasada ante Chile y se desmoronó a los pies de un inspirado Luis Suárez, quien hizo y deshizo lo que quiso en el fondo guaraní.
Los cuatros goles recibidos en el Centenario fueron una cachetada para la Selección, lo que avisa que aún falta mucho para alcanzar el nivel deseado. El profe Francisco Arce destacó la contundencia charrúa y confesó que no salió lo que se había planeado.
“Creo que hubo momentos del partido donde estuvimos normales, es cierto que no pudimos dar secuencia a los pases. Ellos fueron casi perfectos en las ocasiones que tuvieron y golpearon casi siempre que llegaron al arco. Nosotros casi igualamos el trámite, pero ya cuando se iba el partido”, apuntó el “Chiqui”.
A no fallar en casa
El estratega asumió que el equipo no estuvo fino, pero es consciente de que sumando la mayor cantidad de puntos en casa se puede alcanzar el objetivo, que es ir al Mundial de Rusia. “Las eliminatorias dan esas sensaciones de que en casa se juega mejor. Estuvimos en falta jugando afuera, pero tenemos que levantar cabeza. Hablamos con los muchachos que estamos a tiempo. Tenemos que estar atentos en el siguiente combo, seguir seguros en casa y mejorar de visita”, acotó el DT.
En el próximo combo, que se disputará en octubre, Paraguay deberá recibir a Colombia en Sajonia y luego emprender viaje rumbo a Argentina para medir a la Selección Albiceleste.