Fernando Jubero llora por dentro. Está dolido. Siente rabia, impotencia. La derrota ante Cerro Porteño le pica en lo más hondo de las entrañas. No estar más en la lucha por el título picha en Dos Bocas, pero no por el 4-3 ante el Ciclón, sino por el arbitraje.
El DT aurinegro considera que los han “sacado” semana tras semana de la pelea por el campeonato, pero no a través del once contra once.
“Tuvimos que pelear contra todo. A veces nuestros lamentos parecen pataleo del ahogado o del que ha perdido, pero nos hemos sentido siempre muy impotentes por los arbitrajes”, declaró ayer el entrenador, en charla con la 780 AM.
“Es triste que un campeonato quede empañado así y es más triste que no se hable de los partidos sino de decisiones sospechosas”, agregó.
En cuanto al trámite del juego, el profe aplaudió a sus muchachos y valoró el esfuerzo que desparramaron en la cancha. “No pudo ser por varios factores. Conseguimos abrir el marcador con una linda jugada, pero luego entramos un poco en la ansiedad, perdiendo el balón rápido y ahí se vinieron los desajustes defensivos”, explicó.
En Guaraní no le perdonan al réfere Antonio Arias que le haya anulado un gol a Fernando Fernández cuando el juego iba 3-3. También le reprochan la falta que le cobraron a Cáceres, para el gol de tiro libre de Fabbro.
“LLORONES”
“Te da bronca que todo el trabajo de la semana no sirva por tres o cuatro errores arbitrales”, dijo por su parte, a la 970 AM, el volante Jorge Mendoza. El centrocampista sabe que por ahí se les trata de “llorones” por plaguearse tras la derrota, pero entiende que la caída fue injusta. “Arias contra nosotros siempre es la misma cosa. Ojalá no quede ahí. A ellos (los árbitros) les suspenden un partido y después no pasa nada”, añadió. Afirmó que fueron superiores en la segunda mitad y lamentó que en un error viniera el gol del triunfo de Cerro.