Robert Piris Da Motta fue uno de los apuntados en la derrota albirroja ante Venezuela. Lo culpan por no lograr cortar a tiempo la jugada que terminó en el gol que selló la eliminación paraguaya, aunque el empate tampoco bastaba.
Al concluir el encuentro, el futbolista señaló que la fortuna no estuvo del lado albirrojo y no le sacó la nalga a la jeringa. “No hay excusas que valga en esa jugada. Se intentó de todos lados, pero no se dio, la pelota no quiso entrar. Los jugadores dimos todo, por ese lado estamos tranquilos”, expresó.
Además destacó las ganas con la que los guaraníes afrontaron el encuentro ante la Vinotinto.
“Teníamos muchas ganas de ganar, estábamos confiados en poder sacar una victoria porque teníamos lo nuestro. Nos vamos muy tristes”, acotó.
Por último, confesó que los lamentos seguirán por un buen tiempo, quizás hasta que el grupo pueda cambiar la historia. “Vamos a lamentarnos hasta que tengamos otra oportunidad. Y tenemos que prepararnos para que esa otra oportunidad llegue”, agregó Robert.
En el ojo de la tormenta
El rubio mediocampista no convenció desde su convocatoria, debido a que casi no jugó con su equipo, San Lorenzo de Almagro. La afición no perdonó la situación y le dio con un palo.
En las redes sociales Robert Piris Da Motta fue tendencia, más para mal que para bien, donde los internautas, como diciendo “la culpa no es del chancho sino de quien le da de comer”, criticaron tanto al jugador como al entrenador Francisco Arce, quien lo llevó pese a estar fuera de ritmo de competencia.
No obstante, también aparecieron hinchas que defendieron a un diamante en bruto como Robert.