Sin dudas, el club Puerto Diana de Bahía Negra caló hondo en el corazón de todos los aficionados del fútbol.
Desde que se dio a conocer su historia, varias fueron las personas que decidieron aportar su granito de arena en favor del equipo ishir.
Y una de las personas que estuvo desde el vamos fue el presidente del club Sol de América, Miguel Figueredo.
El mandamás del Danzarín había obsequiado a todo el grupo botines nuevos cuando se supo que muchos practicaban descalzos.
Pero la solidaridad del dirigente no terminó allí. Figueredo organizó ayer un amistoso donde agasajó una vez más a todo el equipo chaqueño.
El encuentro, que arrancó a las 10:00, entre Sol y Puerto Diana, terminó 1-0 a favor del elenco de Villa Elisa. Sin embargo el partido solo fue la excusa ideal que utilizó el presi solense, ya que pidió a los hinchas que lleven alimentos no perecederos para poder observar el espectáculo.
Todo lo que juntaron fue a parar al colectivo que trasladaba al conjunto de los nativos.
Sorpresa
Tras el juego, Figueredo los invitó con un asadacho donde él mismo se encargó de servir a sus invitados.
Pero antes de iniciar el almuerzo de confraternidad, el mandamás sorprendió a todos con otro gesto, cuando se acercó a Mateo Zeballos, presidente de Puerto Diana, y tras un efusivo abrazo le regaló su reloj.
“Para nosotros es un orgullo estar en la cancha de Sol, estamos felices de competir en este amistoso y agradezco al presidente por su enorme gesto de solidaridad”, dijo emocionado Zeballos.