La Selección Paraguaya de Fútbol llegó a la Copa América como penúltima entre las selecciones de Sudamérica en el ranking de la FIFA. Y el inicio en el certamen no pudo ser peor. En el debut ante Argentina tuvo un primer tiempo para el olvido; sin embargo, la lección de carácter y determinación que impartió en la complementaria, fue el preciso momento de la resurrección guaraní, que revivió la efervescencia albirroja, devolvió la fe a una hinchada que se cansó de juzgar sin tener verdaderos parámetros y, a costillas de una derrota de México ayer ante Ecuador, consiguió la clasificación a los cuartos de final de la Copa América.
Esta tarde, la Albirroja enfrentará a Uruguay en el cierre del Grupo B. Una vez más, Paraguay no parte como favorito en los papeles previos. Los guaraníes llevan 14 juegos sin poder derrotar a los charrúas y, como si fuera poco, está la espina clavada de aquella final en la Copa América Argentina 2011, donde Uruguay goleó (3-0) para coronarse en el Monumental de Nuñez.
Larga sequía
“El fútbol tiene estas cosas, Cuando llegamos a esta Copa América, éramos 83 en el mundo y todos tenían poca consideración por este equipo. Pero bueno, este grupo tuvo la fuerza, la capacidad para revertir esa situación y hoy los jugadores están demostrando que tienen capacidad, mucha experiencia y saben cómo jugar este tipo de partidos ”, aseguró el DT de Paraguay, Ramón Díaz, a ESPN.
Cabe recordar que la última alegría guaraní ante Uruguay se remonta al año 1947, cuando Paraguay ganó 4-2 en Guayaquil, en la edición 20 de este torneo, que en ese entonces aún no era denominada Copa América. Luego de ese revés, la Celeste mantuvo un invicto de 14 juegos, contabilizando 9 victorias y 5 empates.
Diaz de satisfacción en la Sele
“Las expectativas son grandes, de parte nuestra y del equipo, pero sabemos a qué equipo vamos a enfrentar, la categoría que tienen, pero muy tranquilo, porque el equipo está muy bien, está mejorando muchísimo, todos saben que esto es un proceso nuevo, pero realmente estamos muy satisfechos con los muchachos”, admitió el “Monchi” en la previa a la pulseada con los charrúas, que promete un choque de garras y planteamientos muy parecidos.