Unos 200 policías, junto a la fiscala Nimia Ávalos, ingresaron ayer a la estancia Panambí de la familia De Gásperi para desalojar a unos 250 campesinos armados que habían invadido parte del terreno. Sin embargo, la comitiva policial-judicial solo halló precarias viviendas y maderas aserradas.
Durante la diligencia quedaron detenidos cuatro presuntos buscadores de tesoro. Todos ellos fueron trasladados a la fiscalía local. Ávalos señaló, que no tiene elementos suficientes para vincular a los demorados con la invasión y robo de maderas del predio, por lo que fueron puestos en libertad.